EL ELEFANTE DE BUCAY

El verano es lo que tiene.Las noches se alargan por culpa del calor y por esa energía que le da a los niños chicos y que le impiden irse a dormir pronto.Entonces cuando llega por fín la paz a tú casa es cuando decides hacer algo para relajarte y una de las cosas que yo hago(y pueda contarlas claro)es leer.En estas que ha caido en mis manos un libro de un escritor argentino que se llama Jorge Bucay,en este libro habla de un elefante que,atado a una pequeña estaca,ligeramente hundida en el suelo y evidentemente incapaz de resistir unaacometida seria del enorme animal,permanece sin embargo sujeto año trs año al palitroque.Así es como veo a algunas personas en su relación con el deporte,como el pequeño elefante que no tenía fuerzas suficientes la primera vez que le ataron a la estaca,nos creamos ataduras y límites que seguimos percibiendo como muros infranqueables,a pesar de que nuestra madurez nos permite superarlos.¿Pero que tiene esto que ver con el deporte?,tranquilos que aún no se me a ido la olla del todo.Me viene a la cabeza la imagen del elefante de Bucay,por ejemplo para ilustrar el último triatlón que estuve.Me refiero,al triatlón de Huescar,a ver,era cerca de Baza,era gratis,perfectamente organizado y demás parabienes en todo,y sin embargo aún ha habidogente que no ha ido aduiendo cosas como que no están preparados o que era demasiado para ellos,cosa que verdaderamente extraña puesto que se supone que pertenecen a un club que se dedica a este tipo de pruebas y llevan como mínimo ocho meses entrenando.Y aún me extraña más cuando veo la nómina de participantes que estuvimos en Huescar,a parte de los fijos con las obligadas excepciones de Javi(disfruta de las vacaciones)y Ricardo(la rutina de entrenmiento es sagrada)se presentaron allí triatletas con un par de huevos y coraje para dar y repartir.Me refiero por ejemplo a Sergio Azor,aun sabiendo él mismo que tiene carencias a la hora de nadar,fruto del poco tiempo que le dedica,se presentó con la intención de hacerun triatlón y valla si lo hizo,se portó echo un campeón no le perdió la cara en ningún momento a la carrera,y no se notó que era el primero que hacía.Pero Sergio traía una sorpresa más,venía con su vecino Juanra,otro triatleta,porque hay que llamarlo tambien así,el tipo en cuestión veía de hacer 900 km con el camión es misma mañana,y sin embargo estaba dispuesto por la tarde para completar un sprint en toda su plenitud,lo vi defenderse con coraje y con dignidad en los tres segmentos,puedes estar orgulloso porque yo lo estoy.Tambien Rafa de Guadix,me dio una alegría,se desplazó hasta Huescar(200km ida y vuelta)y no vino solo